DEPORTES / Épico Atlético

Un partido emocionante, vibrante, con tintes de histórico y labrado con mucho sufrimiento, como no puede ser menos en este club, dio al Atlético de Madrid el pase a la final de la primera edición de la Europa League (sucesora de la UEFA) ante el Liverpool en el partido de vuelta en Anfield. El equipo madrileño cayó 2-1, pero el gol de Forlán en el minuto 102 (primera parte de la prórroga) permitió el pase tras el 1-0 favorable del Calderón, gracias también a un gol de Forlán. Sólo por esto, el uruguayo se redime de una temporada irregular. Que no mala, pues lleva acumulados 23 goles en todas las competiciones, lo cual no es poca cosa: exactamente la misma cifra que en su primera temporada en el Atlético, aunque lejos de los 35 tantos de la pasada, donde consiguió el Pichichi y la Bota de Oro.

Pero fue todo el equipo en bloque el que se ganó merecidamente el acceso a la final. Reyes volvió a dar su mejor imagen y estuvo inconmensurable desbordando y, finalmente, dando el precioso y preciso pase gol. La entrada de Jurado dio alas al equipo, que parecía no acabar de definir el dominio que empezó a exhibir mediada la segunda parte y en la prórroga, cuando la necesidad apretaba. Los centrales estuvieron serios, con Perea (casi) rehabilitado y Domínguez en plena forma. Pero el caso es que los jugadores superaron el pánico escénico que pareció atarles durante la primera mitad y buena parte de la segunda y acabaron dando la talla. El Atlético de Madrid accede después de 24 años a una final europea, en la que nos espera el Fulham (un equipo teóricamente asequible). ¡Ya era hora! Pero lo increíble es que, tras un inicio de temporada desalentador, malo sin paliativos, vamos a acabar jugando dos finales (también la Copa del Rey, ante el Sevilla). ¡Quién lo hubiera dicho! Algún mérito tendrá Quique Sánchez Flores.

El gol de Forlán ante el Liverpool que da al Atlético de Madrid el pase a la final de la Europa League 2010


La versión inglesa

MÚSICA / She & Him, melodías sixties

Por fin She & Him, la banda de la actriz Zooey Deschanel y del músico M. Ward, han recalado en Madrid. Ya tenía ganas de verles en directo, no sólo para admirar la belleza de Zooey (que también), sino para disfrutar de sus deliciosas melodías sixties, empaquetadas hasta la fecha en dos discos, llamados -en un alarde de creatividad- "Volume One" y "Volume Two".

El concierto del lunes en Joy Eslava ofreció lo esperado, un repertorio musical que navega entre lo tarareable y lo sentido, con un M. Ward muy metido en su papel de guitarrista admirador de los años 50 y 60 y una Zooey Deschanel que, con patente timidez, tuvo una interpretación bastante correcta (salvo algún pequeño momento en el que le falló la voz). La estupenda banda de respaldo, que varias veces consiguió rozar la perfección interpretativa, le dio un toque tirando a folk, con lo que a veces Zooey se me antojaba una Joni Mitchell reencarnada. El caso es que la hora y media en que se ventilaron 23 temas se pasó volando y, durante un buen tiempo, he seguido canturreando sus tonadillas. Sólo faltaría que fortalecieran su repertorio con alguna que otra más canción movida, como lo son sus singles "In The Sun" y "Why Do You Let Me Stay Here?".

She & Him - "In The Sun"


She & Him - "Why Do You Let Me Stay Here?" (directo en Madrid, 26-4-2010)

CINE / 13º Festival de Málaga (y 4)

"Desechos", de David Marqués (Sección ZonaZine)
Infumable bodrio pretendidamente gracioso y que no llega ni a la categoría de intento de película. Todo empieza cuando unos amiguetes realquilan su armario empotrado para salir de apuros económicos. Si el argumento pudiera dar pie a una comedia surrealista, no es el caso: lo surrealista es el hecho de que dejen a esta película circular por ahí. Si acaso, vamos a salvar las aportaciones de Fernando Tejero y Fele Martínez. Si acaso.

"Cómicos", de Ana Pérez y Marta Arribas (Sección Documental)
Documental más bienintencionado que efectivo, que retrata la vejez de algunos veteranos actores de la comedia como si fuera una metáfora de la desaparición de una ancestral forma de trabajar. Esa de los cómicos ambulantes que recorrían los pueblos con sus montajes teatrales y números que no pretendían otra cosa que hacernos reír (nada menos).

CINE / 13º Festival de Málaga (3)

"Bon Appétit", de David Pinillos (Sección Oficial)

El estreno en el largometraje de David Pinillos es una agridulce historia que narra el viaje a Suiza de un aprendiz de cocinero (convincente Unax Ugalde) con el fin de aprender los secretos del arte culinario en un restaurante de postín. Pero este punto de partida es una excusa para contar la historia de amor/desamor que vive con una sumiller (estupenda Nora Tschirner) con un particular curriculum personal a cuestas. Y, además, la película también habla de la amistad, de sus límites y del papel del trabajo en la vida personal. Temas todos tratados a la vez con delicadeza, crudeza y sinceridad, lo que compone un filme con la suficiente carga emotiva y de contenido como para no perder de vista a su director en el futuro.

CINE / 13º Festival de Málaga (2)

"Que se mueran los feos", de Nacho G. Velilla (Sección Oficial)

La nueva comedia del especialista Nacho García Velilla mantiene las constantes de la precedente, "Fuera de carta" (2008) -que sigo considerando mejor-, donde el director demuestra que domina los resortes más clásicos del género. En este caso, la historia del "feo" del pueblo y sus vicisitudes da pie a un filme que respira buenas y graciosas situaciones, y que demuestra el gracejo y saber hacer de ese pedazo de cómico que es Javier Cámara. Pero, como todas las comedias, los actores de reparto son muy importantes y ahí destacan Juan Diego, Julián López, Carmen Machi, Hugo Silva, Ingrid Rubio... La trama evita casi siempre el trazo grueso y opta más por el retrato costumbrista para, al final, dejar un poso optimista y la sensación de que aún se pueden hacer buenas comedias sin mayores pretensiones. Aunque queda lejos de ser redonda, pues a Nacho G. Velilla todavía no le ha llegado su obra maestra...

CINE / 13º Festival de Málaga (1)

Con un tiempo lluvioso que impide disfrutar plenamente como se merece una ciudad tan bella como Málaga, se ha iniciado una nueva edición del festival que pretende mostrar lo mejor del nuevo cine español. En esta ocasión, los recortes presupuestarios derivados de la crisis han llevado a que el inicio sea en sábado y no en viernes, con lo que tenemos un día menos de disfrute o sufrimiento, según venga el nivel de calidad. Este año, de momento, con lo visto el domingo sólo podemos constatar que sigue la buena cosecha de películas. Que no hace falta recurrir a los santones del cine patrio (léase Almodóvar, Amenábar...) para mantener el listón alto. Tampoco es para lanzar cohetes, pero las historias interesantes siguen surgiendo...

"Planes para mañana", de Juana Macías (Sección Oficial)

La directora madrileña Juana Macías se estrena en el largometraje con un filme sólido y bien dirigido, pero que bebe demasiado de fuentes de inspiración muy claras: el Alejandro González Iñárritu de "Amores perros" (2000), el Guillermo Arriaga de "Lejos de la tierra quemada" (2008), el Rodrigo García de "Mother and Child" (2009)... Macías se adentra en la quizá ya algo manoseada temática de historias cruzadas que realzan su dramatismo en la confluencia de personajes. Pero el caso es que "Planes para mañana" está bien contada y se mantiene con buen pulso hasta una resolución covincente. Las decisiones de futuro dentro de la pareja son el hilo conductor de las diferentes tramas, que se sostienen gracias a no adentrarse en lugares comunes y a varias destacadas actuaciones, como las de la recuperada Carmen Elías, Ana Labordeta y el nuevo rostro de Aura Garrido.

POLÍTICA / ¿Merece Garzón un castigo?

No voy a decir que el juez Baltasar Garzón sea un tipo absolutamente intachable y perfecto. Ante sus innumerables y, a ratos, grandilocuentes actuaciones, algunas veces he pensado que no había en España otro juez más que él, porque siempre asumía todos los casos más reconocidos. Algunos incluso en los que podía sospechar que primaba el afán de notoriedad que otra cosa. Su (ya lejano) flirteo con la política tampoco fue de mi agrado, aunque entiendo que fue más bien camelado por Felipe González para presentarse por las listas del PSOE. Pero, al mismo tiempo, le reconozco su incansable capacidad de trabajo y el riesgo de asumir casos importantes, pero también complejos y de relevante jurisprudencia. Eso de abrir causas al dictador Augusto Pinochet, a funcionarios de la dictadura argentina, al cuestionable Henry Kissinger... No puede por menos que tener todo mi apoyo, independientemente de las probabilidades de éxito que fuera a tener.

En el mismo plano incluyo su investigación para localizar a los desaparecidos bajo el dictador Francisco Franco. Puede ser un caso que le venga grande, que difícilmente encuentre ya a culpables, que logísticamente sea un cacao de dimensiones considerables... Pero luchar por la dignidad de los demócratas asesinados por la dictadura no puede sino volver a tener todo mi apoyo. Como así expresaría cualquier demócrata. En este sentido, quizá algunos dirigentes y partidarios derechistas deberían reflexionar sobre el hecho de que sus referentes políticos se encuentran en los sistemas constitucionales y no en los totalitarios. En la Constitución de la República de 1931, por tanto, y no en la dictadura franquista, que llevó a cabo 50.000 ejecuciones y metió en sus cárceles/campos de concentración a 270.000 personas. Cuando el PP termine de comprender cuál es el marco que debe defender, se acabarán las dudas sobre las intenciones de Garzón, que, por lo demás, no parece haber tenido mayor culpa que la de, quizá, intentar abarcar demasiado. Pero sus intenciones no pueden ser más nobles, y, por tanto, tienen todo mi apoyo. Nuevamente. Y, evidentemente, el PP bien haría de desligarse de uno de los promotores de la causa contra el juez: Falange. ¡Nada menos!

VIAJES: De las Tablas de Daimiel al Parque de Cazorla

Muchos lo daban por perdido, pero el Parque Nacional de las Tablas de Daimiel, en la provincia de Ciudad Real, ha resucitado gracias a las lluvias de este invierno y ha asegurado su continuidad merced a la entrada en funcionamiento del trasvase desde la cuenca alta del Tajo al Cigüela, el río del que se nutre este humedal, un pequeño gran milagro de 1.700 hectáreas (inundadas al 100%) de agua en plena llanura manchega. La lástima es que las aves que visitaban el entorno masivamente hace unas décadas ya han perdido la costumbre con tantos años de sequía por la sobreexplotación humana de los acuíferos. Pero ya volverán, ahora tiene motivos. Actualmente se pueden contemplar sobre todo patos, somormujos y fochas, pero pronto regresará el tráfico habitual de garzas, carriceros, ánades, etc. Los recorridos por el parque a pìe están claramente señalizados y el más común es el que pasa por la Isla del Pan, incluyendo el aviario de la Laguna de Aclimatación, donde podemos contemplar una muestra bien representativa de las aves del parque.

La cercana Daimiel es una bonita localidad que cuenta con algunos monumentos interesantes, como las iglesias de Santa María La Mayor y San Pedro Apóstol. Además, cuenta con un centro coqueto y bien conservado, con la Plaza de España (y su olivo milenario) como corazón de esta villa de 18.500 habitantes. Hacia el sur, se extiende la camarca del Campo de Calatrava, que tiene en Almagro su particular capital. Esta población, bien conocida por su festival de teatro clásico (celebrado en julio), está plagada de casas señoriales e iglesias, muestra de su importante pasado. En el siglo XVI de la mano de los banqueros alemanes Fugger, que se asentaron en la zona, y en el siglo XVIII, cuando Almagro apoyó la llegada como rey del borbón Felipe V. Sin duda, la Plaza Mayor y su Corral de Comedias es el punto más emblemático de la villa. Merece la pena tomarse aquí unas buenas raciones de platos tradicionales manchegos, como asadillo, pisto, migas, duelos y quebrantos...

Siguiendo el camino hacia el sur, ya en la provincia de Jaén, nos encontramos con las ciudades patrimonio de la humanidad Úbeda y Baeza. La primera, de mayor tamaño con sus 36.000 habitantes, cuenta con 48 monumentos notables básicamente renacentistas, como la céntrica Plaza Vázquez de Molina. Por su parte, Baeza, con poco más de 16.000 habitantes, tiene un paseo bien disfrutable alrededor de la Catedral de la Natividad de Nuestra Señora, hacia la Plaza del Pópulo (o de los Leones), pasando por el Palacio de Jabalquinto, el Arco de Jaén y la antigua Universidad, donde impartió clases de francés durante siete años el poeta Antonio Machado (1912-1919). Por cierto, no le gustó nada su estancia, como él mismo dejó escrito.

La culminación de este viaje llegó en el Parque Natural de las Sierras de Cazorla, Segura y Las Villas. Un auténtico vergel de 214.300 hectáreas, con alturas como el Cerro las Empanadas (2.127 metros) o el Cabañas (2.027 m.) y donde nacen los ríos Segura y Guadiana. Hay muchas rutas para caminar, las más importantes y asequibles de las cuales son la de la Cerrada del Utrero y la remonatada del río Borosa. Ambas con espléndidas vistas. En cuanto a fauna, destacan las poblaciones de ciervos, cabras, jabalíes, muflones y gamos, además de buitre leonado, águila real y quebrantahuesos. Muchos de ellos pueden contemplarse fácilmente en el magnífico Parque Cinegético habilitado a tal efecto.