ECOLOGÍA / La contaminación que cubre Madrid

Ya volvemos a tener la boina encima. De contaminación, claro. De veneno que respiramos todos los días los que vivimos en una ciudad como Madrid, donde el tráfico manda y campa a sus anchas escupiendo cantidades excesivas de dióxido de nitrógeno (NO2) y otras pestes. En estos días, diversas estaciones de medición (a pesar de que el alcalde Gallardón las ha cambiado y situado junto a parques) están superando los límites permitidos: frente a los 40 microgramos/m3 de media anual de NO2 limitados por la Unión Europea, en la capital se están llegando a alcanzar los 240 y 280 microgramos entre las 7 y 8 de la tarde (la peor hora junto a las 8-9 de la mañana) -ver gráficos abajo-; según la propia normativa madrileña, los 200 microgramos de NO2 no se pueden superar más de 18 veces al año, pero cuando sólo llevamos poco más de un mes de 2011, estamos a punto de hacerlo ya; al menos dos estaciones han rebasado simultáneamente los 240 microgramos durante dos horas, por lo que se ha tenido que avisar a la población. Asimismo, en 2010 se registraron 12 microgramos de partículas en suspensión frente a los 10 microgramos de media anual de tope estipulados por la Organización Mundial de la Salud (OMS).

Ante este desastre, el alcalde no hace nada. Y la gente no parece tener la más mínima intención de dejar el coche en casa: "ah, ¿por qué el deterioro del aire que respiramos va a limitar mi comodidad?", nos decimos todos. Ojo, me incluyo, como conductor. Pues habrá que obligar, como con el caso del tabaco, ya que no hay una actitud mínimamente cívica. Posibles soluciones: subida significativa y progresiva de impuestos a los vehículos más contaminantes. Fomento de los vehículos menos contaminantes (híbridos, eléctricos, motocicletas, bicicletas, etc.), con desgravaciones por su compra y preferencia en el tráfico. Restricciones de uso para los vehículos más "sucios" dentro de la ciudad. Fomento del transporte público. Fomento de la industria de vehículos "limpios". Están en juego nuestra salud y la calidad de vida general en las ciudades.

Consulta la contaminación de Madrid.

Estación de medición de Méndez Álvaro.












Estación de medición de Cuatro Caminos.












Estación de medición de Plaza Fernández Ladreda.