Impresionante lo de este individuo. Solicita para Viajes Marsans un crédito a Caja Madrid por 26,5 millones de euros que deja de pagar y que había avalado con acciones ya pignoradas con Banesto. Gestiona horriblemente Air Comet, de forma que él mismo reconoce que no hubiera volado en su propia aerolínea, dejando en tierra a miles de personas (tanto en España como en Latinoamérica) y en la calle a 666 trabajadores (que no cobran desde hace ocho meses ni pueden acogerse al desempleo, pues siguen vinculados a la compañía), tras ser embargados sus aviones por un juez británico (ante -de nuevo- el impago de su contrato de leasing) y serle retirada la licencia de vuelo por parte de Fomento.
Precisamente, el ministro José Blanco reconoció sentirse "no correspondido" por Díaz Ferrán, ya que, con el fin de ayudar a salvar la aerolínea, que estaba negociando su venta, el empresario pidió a Fomento no hacer público el expediente de suspensión abierto contra Air Comet en noviembre y, además, el ministerio asumió directamente la negociación con la propietaria de los aviones para ampliar el periodo de pago de la deuda contraída por la compañía privada. Y, todo, finalmente, para nada. Así que el Gobierno, es decir, todos los españoles hemos tenido que pagar 4,5 millones de euros para cubrir las vergüenzas a Díaz Ferrán y fletar los vuelos con el fin de llevar a sus destinos, con todo su derecho, a los pasajeros que habían comprado sus billetes.Y este tipo es el presidente de los empresarios. No sé si la cuestión estriba en si debería dimitir de la CEOE o, más bien, quedarse porque representa muy bien a buena parte del empresariado español. Así nos va.
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