miércoles, 28 de diciembre de 2011

SOCIEDAD / Huir de España

Últimamente, en mi entorno, he encontrado a varias personas que han tomado la decisión o están pensando en emigrar, salir de España, huir de un país que desgraciadamente ofrece pocas perspectivas. Un país que se sumergió en un boom de riqueza fácil asentada en bases de barro y que ahora la paga con los más débiles. Cinco millones de parados es la consecuencia más palpable. Un millón y medio de hogares sin un solo empleo. Mientras tanto, las grandes corporaciones financieras, que prestaron dinero barato, animaron a la gente a hipotecarse y se han repartido jugosas primas y planes de pensiones, se van de rositas y reciben dinero público. Los promotores inmobiliarios se han forrado con la venta de pisos a precios obscenos, mediante la colaboración de los políticos -especialmente locales y autonómicos, y ante la pasividad de los nacionales-, en un enorme pelotazo.

Mientras tanto, desde que se puso en circulación el euro, el coste de la vida se ha disparado un 48%, mientras que los salarios apenas han avanzado un 14%. Y ahora, Rajoy propone como una de sus primeras medidas congelar el salario mínimo (ése que desde su creación en 1980 no había dejado de crecer, sobre todo en los primeros años y entre 2004 y 2009), pero, eso sí, las pensiones que reciban unas migajas (suben un 1% en 2012) sin distinguir entre las jubilaciones mínimas (600 euros/mes) o máximas (2.500 euros/mes). Y ya se está pergeñando entre el Gobierno del PP y la patronal CEOE una reforma laboral que va a lo de siempre: a rebajar las indemnizaciones por despido. Como si este coste hubiera sido un impedimento para que los empresarios hayan despedido a más de tres millones de personas en los últimos cuatro años... Y llega el deterioro de los servicios públicos, como la sanidad en Cataluña, donde se pagará por cada receta lo mismo si eres pobre o rico, enfermo crónico o sano, y en Baleares, con la tasa por tarjeta sanitaria, también la misma independientemente de la situación socioeconómica de cada cual... Repago injusto, que no copago, porque la Sanidad ya se paga de nuestros impuestos.

Visto el panorama de deterioro económico y de injusticia social, es normal que cada vez más gente trate de buscarse las habichuelas en otros países donde se pueda prosperar. No será fácil. Ya hemos conocido lo mal que lo han pasado los inmigrantes en nuestro país y lo mal que nos hemos portado con ellos muchas veces. Ahora, como en los años sesenta, volvemos a hacer las maletas. Porque nuestro propio país nos echa.





domingo, 4 de diciembre de 2011

DEPORTES / El épico Nadal-Del Potro da la 5ª Copa Davis a España

Pocas veces se ha podido disfrutar (y sufrir) de la tensión del tenis como en el cuarto partido de la Copa Davis entre España y Argentina, que ha enfrentado a Rafa Nadal y Juan Martín del Potro y que ha dado a la Roja la quinta ensaladera: todas conseguidas en los últimos 12 años, tres de ellas en los cuatro últimos, convirtiéndonos en el claro dominador tenístico del siglo XXI, después de 99 ediciones del torneo. El partido fue tenso y lleno de errores y aciertos, de altos y bajos anímicos por ambas partes, pero finalmente la cabeza fría de Nadal le llevó a la victoria por 1-6, 6-4, 6-1 y 7-6, convirtiéndos en el punto definitivo que nos daba la Copa Davis. Ha sido un aparentemente rotundo pero muy sufrido 3-1, tras los dos primeros triunfos en individuales (el claro de Nadal sobre Mónaco y el extremadamente trabajado de Ferrer ante Del Potro) y la derrota en dobles (la pareja Feliciano-Verdasco no está en su mejor momento, desde luego). ¡La Armada es imparable!

sábado, 3 de diciembre de 2011

MÚSICA / The Barracudas, espíritu juvenil

Treinta años se cumplen del primer disco de The Barracudas, grupo británico pero de claros ecos de la Costa Oeste estadounidense. Hablamos de ese canto adolescente que era "Drop Out With The Barracudas" (1981), con enormes hits como "I Can't Pretend", "Summer Fun", "Violent Times", "Don't Let Go" o "I Wish It Could Be 1965 Again". Y el viernes volvimos atrás varias décadas para recobrar ese espíritu, que permanece intacto en una formación que sigue contando con sus pilares básicos; Jeremy Gluck (voz) y Robin Wills (guitarra), a los que se suma el estadounidense Chris Wilson, excantante de los míticos The Flamin' Groovies en la época del imprescindible "Shake Some Action" (1976).

Por cierto, el amigo Juancho se ofreció a cambiarle la cuerda de su Gibson 335 al propio Wilson cuando, al principio de la actuación se le rompió y no quería renunciar a seguir tocando con ella (no llevan pipa, así están las cosas). Gran momento haber cambiado la cuerda a Chris Wilson, seguro que Juancho no lo olvidará. Como ninguno de los presentes olvidaremos ese espíritu juvenil que invadió la sala Ramdall gracias a un repertorio de The Barracudas que conserva intacto su gancho (suena más cañero en directo) y que se redondeó con algunas piezas de The Flamin' Groovies, por supuesto.

Juancho, ante Chris Wilson
Juancho, hablando con Robin Wills













Chris Wilson, con su guitarra recién arreglada